Supervisión de embarazo de alto riesgo
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Un embarazo de alto riesgo es aquel en el que existen condiciones médicas o factores que aumentan la probabilidad de complicaciones para la madre, el bebé o ambos. La supervisión de este tipo de embarazo implica controles más frecuentes, exámenes especializados y un acompañamiento multidisciplinario, con el fin de garantizar el mejor resultado posible.
Síntomas
Síntomas de alerta
Algunos signos que pueden aparecer y deben motivar consulta inmediata son:
Dolor abdominal intenso.
Sangrado vaginal.
Fiebre persistente.
Disminución de movimientos del bebé.
Dolor de cabeza intenso con alteraciones visuales.
Hinchazón repentina de manos o cara.
Contracciones antes de la semana 37.
Tipos
Tipos de embarazo de alto riesgo
En Colombia, se estima que aproximadamente el 20% al 25% de los embarazos son considerados de alto riesgo. Entre los tipos más comunes encontramos:
Riesgo materno previo: enfermedades como hipertensión, diabetes, lupus, epilepsia o cardiopatías.
Condiciones durante el embarazo: preeclampsia, placenta previa, amenaza de parto prematuro.
Factores sociales: embarazo adolescente, embarazos en mayores de 35 años, pobreza extrema.
Factores obstétricos: embarazos múltiples (gemelos), antecedentes de abortos o cesáreas múltiples.
Factores de riesgo
Factores de riesgo
Edad materna menor de 17 o mayor de 35 años.
Enfermedades crónicas (hipertensión, diabetes, problemas cardíacos).
Infecciones de transmisión sexual.
Consumo de alcohol, tabaco o sustancias psicoactivas.
Embarazos múltiples.
Malformaciones uterinas.
Obesidad o desnutrición.
Antecedentes de partos prematuros o abortos.
Situaciones psicosociales adversas (violencia, falta de apoyo familiar, migración).
Prevención
Prevención
Aunque no todos los embarazos de alto riesgo pueden evitarse, se pueden reducir las complicaciones:
Acudir temprano a control prenatal.
Seguir las recomendaciones médicas sin interrupciones.
Mantener una alimentación adecuada y estilo de vida saludable.
Evitar automedicarse o interrumpir tratamientos.
Buscar apoyo emocional y psicológico si se requiere.
Asistir a centros de salud que cuenten con atención especializada.
Vivir un embarazo de alto riesgo
Vivir un embarazo de alto riesgo puede generar ansiedad o miedo, pero con seguimiento adecuado y acompañamiento emocional, muchas mujeres logran embarazos exitosos. Es importante tener una red de apoyo, informarse sobre la condición, y confiar en el equipo médico. La comunicación abierta y continua con los profesionales de salud ayuda a disminuir la incertidumbre y mejorar el bienestar de la madre y del bebé.
Diagnóstico / Detección
Diagnóstico
La clasificación de un embarazo como “de alto riesgo” se basa en:
Evaluación clínica detallada (Resolución 3280 del 2018. Permite delimitar la ruta de atención que deben tener las pacientes).
Análisis de historia médica y antecedentes obstétricos.
Exámenes de laboratorio específicos según el caso.
Ecografías especializadas (como Doppler obstétrico).
Valoración por especialistas según la patología identificada.
Detección
La detección oportuna es fundamental para prevenir complicaciones. Se recomienda:
Iniciar controles prenatales antes de la semana 12.
Alertar al equipo médico si hay antecedentes de enfermedades o embarazos difíciles.
Identificar factores de riesgo sociales y emocionales desde el comienzo.
En Colombia, el programa de control prenatal integral establece rutas de atención diferenciadas para embarazos de alto riesgo, que incluyen remisión a instituciones de mayor nivel cuando es necesario.
Tratamiento
Tratamiento
El manejo depende del tipo de riesgo y puede incluir:
Controles prenatales más frecuentes (cada 1 o 2 semanas).
Medicamentos para controlar presión, glucosa u otras condiciones.
Reposo o restricción de actividad física si hay amenaza de parto prematuro.
Hospitalización preventiva en algunos casos.
Ecografías y monitoreo fetal más intensivos.
Inducción del parto o cesárea programada si el embarazo no puede continuar hasta término.
¿Cómo lo tratamos en la Fundación Santa Fe de Bogotá?
Especialidades médicas que participan
Ginecología y obstetricia.
Medicina materno-fetal.
Nutrición.
Psicología perinatal.
Trabajo social.
Anestesiología (para planificación del parto).
Especialistas según el riesgo identificado: endocrinología, cardiología, infectología, entre otros.

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Especialidades que la tratan
Nuestros especialistas

Dra. Giuliana Puccini Santamaria
Especialista en Ginecología y Obstetricia, Especialista en Medicina Materno Fetal
Dra. Giuliana Puccini Santamaria
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